Si quieres ser tatuador o ya has iniciado el proceso tienes que tener una serie de conocimientos adicionales respecto a la forma de trabajar y evolucionar en tu carrera. En esta fase inicial de emprendimiento, no sólo es importante saber qué hay que estudiar, cuáles son los requisitos para ser tatuador en España, cuánto se gana o cómo y qué hacer si quiero ser tatuador y, por ejemplo, no sé dibujar.  Toda la información sobre si da dinero o no, cómo ser un tatuador exitoso o si realmente vale la pena invertir en esta profesión, la puedes obtener por otras fuentes.

Aquí te vamos hablar de cómo hacerte un profesional en la gestión de tu negocio. Punto de partida: eres freelance, emprendedor, autónomo, CEO o cómo te quieras llamar. Nos centramos en la actividad por cuenta propia, es decir, tu llevas el negocio, no trabajas para otro.

PREVIO: 

Es necesario reflexionar sobre el punto de partida, qué conoces del sector, por qué quieres entrar en él, qué expectativas tienes… Además, este punto de partida puede verse influido por la situación económica que tengas de partida, por lo que es importante saber si lo compaginaras con otro trabajo (es lo que se llama pluriactividad), si tienes prestación por desempleo que puedas compatibilizar o capitalizar u otras situaciones. Todo esto es necesario si quieres saber realmente cómo ser tatuador.

Paso 1. Plan de negocio y viabilidad.

Es muy importante. Es un instrumento que tiene una doble finalidad:
Por una parte, sirve para que plasmes cómo vas a dar vida a tu empresa: marketing, previsión de gastos, ingresos, margen temporal...
Por otra parte, sirve de base para la solicitud y aprobación de las subvenciones para el fomento del trabajo autónomo.

Paso 2. Vender, vender y vender.

Con el plan de negocio ya has reflejado las líneas maestras de cómo vas a intentar llegar a tus clientes, pero luego está también la realidad y es que eres el nuevo y aún desconocido. No es tan sencillo como ver unos tutoriales de Youtube de algún crack del marketing digital, hacer una web y mover un poco Instagram. Es más complejo.

Aquí es fundamental que sepas cómo vas a desarrollar tu actividad: con local o sin local; puedes intentar localizar a alguien que te subcontrate si tiene picos de trabajo; si te vas a especializar en determinada tipología de diseños...

Paso 3. Los temas fiscales y jurídicos.

Primero, alta en Hacienda y Seguridad Social. Para ello, tener claro el epígrafe de tu actividad que será seguramente el 887.2 (o el 979.9). Puede que te tengas que complementar con el 839.2.

Segundo, tu gestión fiscal, que girará en torno a dos asuntos:

· La facturación: tendrás que llevar un control absoluto sobre tus facturas de gastos y de ingresos y seguir la normativa establecida sobre facturación.
Importante aquí que conozcas la estructura general de una factura en cuanto a los importes que se recogen: imagina que realizar un tatoo por importe de 100 euros. Pues bien, a ese importe le afectan dos conceptos:
IVA --> el 21% del importe, lo sumas.
Retención --> si es a particular no lleva; si es a profesional o empresa, sí. Al principio, el 7%; luego el 15%. Se resta. Por tanto, el importe será 100 + 21 - 7 = 114 euros

· Los impuestos: consecuencia de lo anterior, gestionarás dos tipos de impuestos: IVA: modelos 303 (cada trimestre)y 390 (anual) IRPF: modelos 130 (cada trimestre) y 100 (anual, la famosa declaración de la renta)

Respecto a temas administrativos y jurídicos, tendrás que tener en cuenta tema de licencias para el local, si es necesario acceder a Registros específicos según tu CC.AA., adaptación a normativas sectoriales (fundamental, protección de datos)

Paso 4. El seguro.

Si con lo anterior te has perdido, ahora te voy a levantar dolor de cabeza...

Hablamos de un seguro de responsabilidad civil profesional (si tienes local, es seguro distinto). Las claves del seguro son las siguientes:
Uno. No todas las compañías lo aseguran por lo que revisa que la actividad específica que consta es Tatuajes y anillado.
Dos. Franquicia. Es el importe que, en caso de siniestro, asumes tú.
Tres. Coberturas; es fundamental que revises que integra la responsabilidad civil de explotación, así como la post-trabajos. Por supuesto, que integre gastos de defensa y fianzas. Según el caso, necesitarás también responsabilidad civil patronal y responsabilidad civil locativa.

Paso 5. Ingresos, gastos, beneficios.

Ya estás en marcha ¿cómo va la empresa? ¿Es lo que esperabas? ¿Algo falla? Quizá te estés desviando del plan de empresa o es necesario derivar hacia otras formas de prestación de servicio. Reflexiona, pero sobre todo, actuá.

No siempre todo sale perfecto a la primera, pero eres un profesional y lo vas a conseguir.